El Índice de salarios registró en el primer semestre un crecimiento promedio de 12,4 por ciento, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). La cifra está dos puntos por encima del promedio de mediciones oficiales y privadas.
En la comparación interanual, la carrera es palmo a palmo: si los salarios crecieron 25,4 por ciento desde junio de 2012, la inflación de privados avanzó 24 por ciento. Los tiempos en los que los sueldos le ganaban hasta 5 puntos a los precios, como 2011, parecen cada vez más lejanos.
Con el grueso de las negociaciones paritarias cerradas, los trabajadores del sector privado registrado y del sector público se aseguraron, en promedio, mantener el poder adquisitivo de sus salarios en lo que va del año. Los asalariados que están en blanco en las empresas privadas ganan un 12,7 por ciento más que a comienzos de 2013, mientras los del sector público obtuvieron un 12,9 por ciento más.
En cambio, los trabajadores del sector privado no registrado (es decir, aquellos que trabajan en negro) avanzaron en el semestre con un rezago de 2 por ciento respecto al resto de los asalariados. Según el Indec, sus sueldos aumentaron 10,6 por ciento, en línea con el IPC Congreso (10,4 por ciento), pero por debajo de otras mediciones de inflación alternativas al IPC oficial.
Los salarios públicos y del sector formal también se defendieron frente al Índice de Precios al Consumidor que elabora la ex directora de Precios del Indec Graciela Bevacqua, desplazada del organismo por el secretario de Comercio Guillermo Moreno. Bevacqua midió en el semestre una inflación del 11,4 por ciento.
Sin embargo, los distintos promedios salariales (registrado, no registrado y público) perdieron terreno respecto del IPC que elabora la Dirección Provincial de Estadística y Censos de San Luis. El IPC San Luis es, ni más ni menos, el que usa la Secretaría de Políticas Económicas y Sociales de la CGT oficial para seguir la evolución de los salarios reales. Los técnicos de la CGT solían emplear el IPC 9 provincias, hasta que muchas jurisdicciones dejaron de publicar sus indicadores. Ahora utilizan el IPC San Luis y el del Indec como extremos.
El IPC San Luis marcó en el semestre un avance del 13,2 por ciento, casi un punto por encima del Índice de Salarios del Indec. El IPC oficial quedó muy lejos y avanzó en el semestre 4,7 por ciento, o casi un tercio contra los salarios. El IPC puntano trepó 24,6 por ciento en doce meses -algo menos que los salarios- y el del Indec, 10,4 por ciento.
Consumo preelectoral
Los salarios aceleraron su marcha a partir de marzo, cuando comenzaron a cerrarse las paritarias y con la dispar política de congelamiento de precios que implementó el Gobierno.
Así, el Índice de Salarios trepó 2,58 por ciento en marzo, 2,15 por ciento en abril, 3,69 por ciento en mayo y 2,08 por ciento en junio, según el Indec, y se mantuvieron siempre por encima del IPC Congreso, que aceleró continuamente desde el 1,5 por ciento de marzo al 1,9 por ciento de junio.
Sin embargo, algunos informes privados dieron cuenta de una nueva escalada de la inflación en julio. Según el índice Inflación Verdadera, un relevamiento de precios online que los economistas suelen utilizar como anticipo de los índices de consultoras, la inflación rozó el 4 por ciento interanual a mediados del mes pasado y se mantuvo durante todo julio por encima del 3 por ciento.
Fuente: Ambito Financiero
Imagen: www.diariobae.com