El primer satélite geoestacionario de telecomunicaciones argentino, ARSAT-1, cumplió exitosamente, uno tras otro, los pasos para lograr su posición correcta tras su lanzamiento el pasado 16 de octubre desde la Guayana Francesa, y ya se encuentra en órbita, informó el presidente de la empresa nacional de soluciones satelitales, Matías Bianchi.
“El satélite quedó ayer (por el domingo) en la posición orbital 81, en la cual se va a hacer la prueba de la carga útil (antes de estacionarlo en la órbita 72), que es lo último que queda probar”, dijo Bianchi durante una conferencia de prensa realizada en la Estación Terrena de ARSAT, en la localidad bonaerense de Benavídez. “Los hitos importantes que se dieron durante la semana pasada fueron el despliegue total de los paneles solares, que son los que generan la energía, y la antena de comunicaciones, lo cual, sumado a que pudo mirar a la Tierra, cierra el circuito de que tenemos un satélite”, resaltó Bianchi.
En el trayecto a la posición geoestacionaria 81° oeste, se fue probando una parte de los componentes de la plataforma de servicios, como actuadores (ruedas de inercia), sensores y giróscopos, las computadoras y las tablas de temperaturas. Las pruebas con el módulo de comunicaciones durarán un mes, a partir del cual el aparato será movido a la posición definitiva, en la órbita 72, para entonces sí comenzar a prestar servicios.
El jefe del Proyecto ARSAT-1, Andrés Rodríguez, precisó durante la exposición que las pruebas de carga útil se hacen en la posición orbital 81 “porque en la 72 está el otro satélite que alquilamos actualmente y, para facilitar que no haya interferencias, se trabaja en nuestra segunda posición orbital”. Más tarde, se hará un movimiento orbital sencillo y planificado para desviarlo, en una maniobra que llevará 15 días más.
Juan Aurelio, jefe de Operaciones Satelitales, contó que “fue realmente increíble cómo respondió todo el equipo desde el lanzamiento, con mucho trabajo estresante en 24 horas de turnos continuos; a medida en que uno va cumpliendo los objetivos y ve que el satélite responde, es una gran satisfacción, así que sólo hay palabras de agradecimiento y felicitaciones”. “Respondió todo de acuerdo con lo planificado y esperado y, por suerte, no tuvimos ningún tipo de contratiempo”, agregó Aurelio.
Fuente: Tiempo Argentino