Según la revista Debate, en unos años desplazará a la televisión por cable.
En un reciente artículo publicado por la revista “Debate”, suscripto por el periodista Manuel Barrientos, en pocos años la televisión digital desplazará a la televisión por cable en nuestro país, como consecuencia del avance tecnológico y del impulso que le está dando el Gobierno Nacional.
La nota que contiene datos interesantes sobre el desarrollo y el futuro de la televisión en la Argentina y la opinión de distintos especialistas, por lo que reproducimos una parte de ella para nuestros lectores.
“El creciente peso de las redes sociales en la vida pública reconoce la existencia de un
sujeto espectador distinto, en el que conviven la atracción ancestral por los grandes
acontecimientos y los espectáculos masivos con un interés mayor por tener acceso a
contenidos específicos y selectivos y participar en aquellos medios que tengan componentes interactivos. Como explica a Debate el especialista en comunicación de la Universidad de Buenos Aires, Mario Carlón, “cada vez más, el espectador programa lo que quiere ver, cuándo lo quiere ver y cómo lo va recibir”. Este fenómeno provoca que hoy los medios masivos convivan en su preponderancia con nuevos medios como Facebook, Youtube y Twitter.
Entre los intereses selectivos y las convocatorias masivas, la puesta en marcha de la televisión digital en la Argentina llegó para desplazar en pocos años a la actualmente omnipresente televisión por cable. El sistema digital permite recibir un mayor número de canales, con una mejor calidad de sonido y de imagen. También abre la posibilidad de ofrecer servicios interactivos con la programación televisiva, visualizar contenidos en una guía de programas, acceder a canales de radio, disfrutar de visión multicámara (para eventos deportivos en particular), y recibir la señal en equipos portátiles y móviles (receptores en medios de transporte público o en celulares), entre otros beneficios.
El Afsca lanzará dentro de pocos meses el concurso de nuevas licencias para señales digitales gratuitas en todo el territorio argentino. La confección de los pliegos requiere de estudios técnicos que estipulen con precisión qué cantidades de señales pueden funcionar correctamente en cada región. Esa tarea técnica podría estar terminada a fines de marzo. Se estima que podrían otorgarse más de un centenar de licencias, con la particularidad de que el sistema digital permite dividir a cada señal por cuatro. También se está estudiando la factibilidad de concursar licencias para el sistema de televisión móvil.
El Gobierno ya puso en marcha el Plan Operativo de Promoción y Fomento de Contenidos Audiovisuales y Digitales, que abrió diversos concursos para la producción de contenidos para el nuevo sistema de televisión digital pública. Los fondos invertidos ascienden a 35 millones de pesos y financiarán 230 horas de programas para la televisión digital (unitarios, miniseries de ficción de trece capítulos y ocho documentales).
El plan apunta a la promoción de contenidos audiovisuales para televisión digital y el fortalecimiento de las capacidades productivas de todo el territorio nacional y busca incentivar un nuevo tipo de televisión que “contribuya a hacer realidad el derecho a que todos los sectores sociales de nuestro país puedan comunicar, compartir y recrear, sus historias, sus valores, su forma de ver el mundo”.
Lanzado en 2010, hasta el momento, el sistema de televisión pública digital incluye los canales Encuentro; la infantil Paka Paka; Incaa TV; Canal 7; Gol TV; Vivra; CN23; C5N y Telesur. En las últimas semanas se incorporaron cuatro nuevas señales: la infantil Tateti; la musical Video Éxito; el canal de turismo Argentina HD; y Suri TV, que pone el foco sobre los pueblos originarios, con transmisión de programas de Paraguay, Chile, Bolivia y Ecuador. Están abiertas las negociaciones para transmitir en formato digital a los canales de aire y se estima que el primero en sumarse sería Telefé, que de forma reciente adquirió la tecnología adecuada. Canal 9 también subiría en el transcurso de este año a la grilla.
Además, se está trabajando en el canal del Ministerio de Ciencia y Tecnología, que podría incorporarse a mediados de este año al sistema público. La Secretaría de Cultura y la Secretaría de Derechos Humanos junto al Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) también tendrían sus propias señales.
Como había anticipado Tristán Bauer a Debate en octubre último, para fines de marzo estarán funcionando 17 plantas de transmisión digital. A fin de año se prevé que la cifra llegue a 47 y serían cien las plantas totales que estarían abiertas a finales de 2012, logrando una cobertura integral del territorio argentino.
También pronto estará en funcionamiento la transmisión para celulares y televisión móvil. “El plan va a representar una revolución absoluta en la manera de transportar y de llegar a los hogares con ese medio que es la televisión”, señaló el presidente de Radio y Televisión Argentina en aquella entrevista.
La torre única
Para el segundo semestre está previsto el comienzo de la construcción de la “Torre Única de Comunicaciones del Área Metropolitana”, que actuará como soporte de las transmisiones de la televisión pública digital. Con 360 metros de altura (260 de la obra más cien de la monumental antena), se convertirá en el “edificio más grande de América del Sur”, según explica Héctor Muñiz, uno de los líderes del grupo de arquitectos que ganó el concurso nacional de ideas y anteproyectos impulsado por el Ministerio de Planificación.
Emplazado en terrenos inutilizados del ferrocarril Roca en la Ciudad de Avellaneda, la estructura también albergará a veinte emisores de frecuencia modulada, centrales de comunicación de organismos de seguridad y de control de navegación aeroportuaria. De sus 45 pisos, diecisiete estarán destinados a oficinas. Además, incluirá plantas culturales, un museo de comunicaciones y un auditorio. Se estima que la obra podría estar inaugurada a fines de 2013.
El fin de los medios masivos
“Estamos viviendo el fin de los medios masivos. Seguirán existiendo la radio, el cine o la televisión, pero finalizó la etapa en la que esos medios dominaban la vida social como ya nunca lo volverán a hacer”, sostiene Mario Carlón, doctor en Ciencias Sociales y profesor de Semiótica de la Universidad de Buenos Aires.
Autor de los libros “Sobre lo televisivo: dispositivos, discursos y sujetos” y “El fin de los medios masivos”, el especialista asegura que, antes, los medios masivos eran los programadores hegemónicos de la oferta del consumo cultural.
Hoy, en cambio, conviven con otros medios que tienen una importancia social cada vez mayor, como la telefonía móvil, Facebook, Youtube, Twitter e, incluso, Skype. “Cada vez más, el espectador programa lo que quiere ver, cuándo lo quiere ver y cómo lo va recibir”, asegura.
¿Con qué tipo de espectador se encontrará la televisión digital en la Argentina?
Es un tema muy complejo pero, ante todo, es cada vez más un espectador multimedia, con gran capacidad para consumir y operar, incluso, varios medios a la vez. Ya no es el espectador, lector u oyente de los medios masivos, que concentraba su atención en una sola práctica social de consumo. Habrá momentos en que apagará todo y sólo se dedicará a ver un partido de fútbol o una película, pero ya no serán tantos como eran antes. Es un sujeto que mantiene los saberes de los medios masivos -las investigaciones dicen que los chicos siguen mirando mucha televisión- pero es muy frecuente el consumo de muchos medios a la vez.
¿Qué cambios cree que implicará el avance de la televisión móvil?
Multiplicará las posibilidades de consumo en nuevos contextos y eso siempre es importante, porque los contextos receptivos definen, en parte, los sentidos de los discursos. Pero hay cosas que no cambiarán, porque la televisión seguirá hablando sólo dos lenguajes: directo y grabado (el lenguaje del cine dentro de la televisión).
¿Cuáles serán aquellos contenidos masivos que perdurarán en el nuevo mundo de la
televisión digital?
Los principales discursos masivos de la historia son las transmisiones en directo de grandes acontecimientos: los mundiales de fútbol, las bodas reales, los rescates como el de los mineros en Chile, etcétera. Son transmisiones que han tenido audiencias de cientos de millones de espectadores (todos a la vez mirando lo mismo) y, a veces, de miles de millones. Eso no cambiará: ahora ya no se verán sólo por televisión sino en muchas pantallas y contextos receptivos, pero no habrá cambios a nivel discursivo. El lenguaje del directo es muy limitado y siempre es el mismo.
¿Qué otras producciones masivas subsistirán?
La ficción masiva se ha recuperado notablemente con las series norteamericanas. Ya no se ven como se veían antes. Cada uno las ve cuando quiere y puede (por streaming, bajadas en DVD, cuando las emiten las señales), pero su audiencia es de alcance global. La gran novedad es que estas series han acortado la brecha de calidad que históricamente existió entre cine y televisión”.
Fuente: Revista Debate
www.revistadebate.com.ar